11 de noviembre de 2009

Para mi abuela

Sana, sana, culito de rana,
si no se cura hoy,
se curará mañana.

Siempre te recuerdo diciendo estas palabras. Y tus cuentos, esos cuentos escritos en ninguna parte que tantas y tantas veces me has contado, siguen resonando en mi cabeza con tu tierna voz rota, llena de amor. Algún día prometo escribirlos por ti para que no caigan en el olvido, algún día cuando mi corazón esté fuerte y no me embargue la nostalgia al ponerlos en palabras.

3 de noviembre de 2009

A mi niña

Despierta, mi niña, que ya llegó el día.
Abre los ojos, que ya salió sol.
Sal de la cama, que te echo de menos.
Canta conmigo, alza la voz.

Grítale al mundo que ya estas despierta,
ponte bien guapa y sal al balcón.
Mira la vida con ojos prestados,
guárdate el mundo en el corazón.